El 26 marzo de cada año se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino con el fin de concientizar e informar sobre la importancia de efectuarse controles ginecológicos para evitar enfermedades, entre ellas el cáncer de cuello de útero. En el Hospital Provincial Neuquén Dr. Eduardo Castro Rendón hay un equipo de profesionales que trabaja en la prevención de esta enfermedad.
Carolina Lizarraga, Luciana Hita y Adrián Aguirre integran el servicio de Ginecología del HPN y están formados en un posgrado de la sub especialidad en Patología del Tracto Genital Inferior.

“Nos ocupamos de la prevención, la atención, diagnóstico y tratamiento de las pacientes que tienen alguna patología en el cuello del útero, la vagina, la vulva y la región perineal ”, dijo Carolina Lizarraga y agregó “en nuestro hospital vemos unas 60 pacientes por semana, si bien cada hospital cabecera tiene su ginecólogo capacitado para hacer todo lo que es tracto genital inferior, hay algunas situaciones donde nos interconsultamos y recibimos alguna paciente que viene derivada del interior”.
Cáncer de Cuello Uterino
El Virus de Papiloma Humano (VPH) es el que causa el cáncer de cuello de útero. Se produce por una infección persistente de este virus a lo largo del tiempo, “son cambios que se producen en las células del cuello del útero, esos cambios demoran y tardan mucho tiempo, no es que el cáncer aparece de la noche a la mañana” dijo Lizarraga y agregó “tenemos lesiones que aparecen por ejemplo en un estudio de Papanicolaou (PAP) y nos permite evitar que esas lesiones progresen o lleguen a un cáncer porque ahí podemos intervenir”.
Por su parte Adrián Aguirre comentó “la buena noticia que tenemos para darle a los pacientes es que se puede prevenir con información, educación, con las vacunas que tenemos actualmente” y agregó “la OMS ha declarado que quiere que desaparezca el cáncer de cuello uterino porque es prevenible”.
“Tenemos la posibilidad de hacer prevención de esta enfermedad, contamos con la vacuna en el calendario nacional de vacunación a partir del año 2011, es gratuita y obligatoria para las mujeres y varones a los 11 años” dijo Aguirre y agregó “hay que cuidarse durante las relaciones sexuales también, porque el VPH es un virus que puede transmitirse de persona a persona”.
Alertas
“Las lesiones que buscamos son todas las que podemos tratar y prevenir y no dan ningún síntoma, como el cuello de útero no está a la vista de la paciente tenemos que examinar” dijo Luciana Hita y agregó “la paciente no va a tener ni flujo ni dolor ni nada porque es algo que se produce adentro de las células del cuello del útero, por eso las examinamos con diferentes técnicas y a su vez tenemos otra ayuda que es el estudio en el servicio de anatomía patológica que nos va a decir si la paciente tiene o no una lesión”.
Hita comentó “ tanto con un test de VPH como con un PAP, que son los dos estudios que utilizamos para detectar lesiones y la colposcopia que se realiza eventualmente para tomar biopsias, son los elementos que utilizamos para el diagnóstico de esas lesiones en lo que llamamos prevención secundaria, la primera es la vacuna” y agregó “desde octubre de 2014 contamos con el test de VPH que es un test molecular que busca el ADN del virus adentro de la célula, es un test que tiene mucha sensibilidad, este método nos es muy útil porque captamos más pacientes que con el PAP que también es un excelente método pero no tiene tanta sensibilidad”.

Edades para las consultas y realizar estudios
“La mujer a partir de que empieza con su menstruación debería consultar al ginecólogo en forma frecuente, no siempre los exámenes van a ser igual en una adolescente que no inició relaciones sexuales que en una mujer de 35 años que ya tuvo 3 hijos, el ginecólogo va adaptando el control y el examen ginecológico de acuerdo a la necesidad y la edad de la paciente” dijo Carolina Lizarraga y agregó “nosotros nos regimos por las normas de nación y consensos internacionales donde se sugiere y se recomienda la toma del PAP a partir de los 25 años, porque se sabe que el virus del VPH es una infección muy frecuente, sobre todo en la edad de la adolescencia o cuando se inician las relaciones sexuales y con el cambio de pareja, pero en el 85 por ciento de esas infecciones son transitorias y no provocan nada, de hecho de cada 10 personas 8 en algún momento de su vida van a tener el VPH tanto mujeres como varones, y muchos lo tuvieron y no se enteraron”.
Lizarraga comentó “cuando se trata de un tamizaje de las pacientes, la edad objetivo es a los 25 años con el PAP y a partir de los 30 años agregamos el test de VPH, entre esa edad y los 65 años se hace el test y si da positivo recién analizamos la muestra citológica que son las que nos da el PAP y que nos muestra si hay algún cambio en la células del cuello del útero, y el test de VPH me permite ver si la paciente tiene o no el virus” y agregó “las pacientes que tienen el virus las estudiamos un poco más para ver si provocó algún cambio o alguna lesión, y allí la derivamos a un especialista y se le hace una colposcopia, una biopsia, y un eventual tratamiento de la lesión, si da negativo el test de VPH se hace cada 5 años, tenemos la tranquilidad de que en ese periodo no va a desarrollar un cáncer”.
Incidencia
Dentro de los cánceres en las mujeres el primero que causa la muerte es el de mamas y el segundo de cuello de útero, “en estos últimos 40 años la tasa se ha mantenido igual en Argentina y Neuquén, el cáncer de cuello de útero es la segunda causa de muerte por cáncer en las mujeres” dijo Lizarraga y agregó “es un cáncer prevenible que tiene mucha incidencia en mujeres de entre 35 y 45 años, muchas mueren por esa enfermedad, casi el 50 por ciento, en Argentina se diagnostican entre 4500 y 5000 nuevos casos y mueren entre 1800 y 2000”.
Lizarraga concluyó “la vacuna es la herramienta más eficaz que tenemos para prevenir el cáncer de cuello de útero y los controles periódicos ginecológicos, no debería morir ninguna mujer por cáncer de cuello de útero”.